La Meditación, un camino directo al SER

Independiente del tipo de Meditación que diariamente realizamos, sea de origen Budista, Hinduista, Védica, Yóguica, o técnicas de concentración que usualmente se conocen como meditación. El objetivo fundamental de la Meditación debe ser llevar la mente a su nivel de profundidad donde esta se encuentra con la fuente primaria de los pensamientos, y es allí en ese silencio profundo donde la mente se revitaliza.

Este proceso requiere una técnica que nos enseña a llevar la mente a este nivel pero debemos tener en cuenta que la mente es una energía sutil que igual que el cuerpo tiene unas características determinadas en cada persona, estas características se desarrollan por varios factores, entre ellos el contexto sociocultural en el que nació, la influencia planetaria a la hora de nacer, y a partir de allí el desarrollo de unos deseos y gustos frente a la vida.

Una vez tenemos claro las características de cada persona podemos iniciar la técnica correspondiente logrando que la energía mental pueda realmente de forma placentera y agradable ir a un estado más puro donde nacen todas las fuente de pensamiento, allí es donde la energía mental encuentra un silencio placentero y agradable, el cual le otorga su propia vitalidad y regeneración.

De allí que adoptar una técnica de meditación sin conocer la propia naturaleza mental, si bien puede ayudar, no logra los óptimos que podría alcanzarse cuando de antemano conocemos la vibración alrededor de nuestra mente.

En la ciencia del Yoga a estas características mentales se les denomina Samskaras o impresiones que gradualmente configuran nuestra mente y por consiguiente la forma de relacionarnos e interactuar con la sociedad. Surge entonces la pregunta como logramos conocer cuáles son nuestros Samskaras? es algo que la vida misma nos irá mostrando con el tiempo. Pero lo que si podemos saber de antemano es la tonalidad de la vibración en la cual nuestra mente se siente más afín, es algo que hace parte de la naturaleza misma de la mente desde nuestro nacimiento. Ahora un guía debidamente cualificado sabrá orientarte en la identificación de la propia naturaleza mental. Es este punto donde la meditación es orientada y soportada bajo la ciencia de Jyotish y Ayurveda.

Una vez logramos identificar la mejor vibración en la cual la mente puede transitar, será más fácil que la mente logre ir a las profundidades de ella misma y allí encontrar esos momentos de máximo placer, de dicha, de goce donde encuentra su naturaleza real. Una vez se vive esta experiencia meditativa la percepción de la realidad cambia positivamente, porque las impresiones y sus efectos cambiaran hacia planos más positivos.

Esto logra gradualmente sensaciones de felicidad que se manifiestan de manera natural, al margen de una impresión sensorial, es decir empezamos a vivir experiencias de goce interno que no obedecen necesariamente a la satisfacción de los objetos de los sentidos. Incluso ahora el goce de los sentidos se manifiesta más plenamente, pues sabemos que su real goce obedece a una percepción interna y no a el objeto en sí.

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Sebastian Sierra .